Dermatitis, eczema, psoriasis, acné, sarpullidos…
Todas son señales de que el cuerpo necesita depurar.
La piel muestra lo que el hígado y el intestino no pueden eliminar.
Cuando el hígado está saturado de toxinas y el intestino inflamado,
la piel se convierte en un canal de desborde.
Empezá por el Kit de piel o el Kit de desparasitación con foco hepático.
Ambos ya incluyen una desparasitación interna,
para trabajar desde la raíz el origen del desequilibrio
Para acompañar el proceso, podés sumar hongos adaptógenos como Tremella o Phellinus, que ayudan a regenerar y desinflamar desde adentro hacia afuera.